miércoles, 31 de julio de 2013

Cuando te sientes herido por tu pareja

Yo crecí con una madre iracunda que me atacaba de la nada. Siendo hija única y altamente sensible, el miedo y el desgarro de ser tratada de forma tan poco amorosa era insoportable. Así que en lugar de sentirme herida, me adormecí a través de aprender a quedarme en mi cabeza en lugar de estar presente en mi cuerpo, y de enfocarme en cuidar de los sentimientos de los demás. La única manera de sobrevivir era no saber que estaba siendo tan herida.
Me había cerrado tan profundamente a mi propio dolor, que cuando tuve hijos, no pensé dos veces en gritarles. Un día, cuando le estaba gritando a mi hijo Josh, que tenía como 2 ½  años, me miró con lágrimas en sus mejillas y me dijo, “Mami, cuando me gritas, siento como que me voy a morir.”
Yo me quede anonadada y devastada. Lo último que quería hacer era lastimar a mis hijos. En ese momento, no solamente deje de gritar, prometí nunca volver a gritarles a mis hijos otra vez. Y no lo hice. Entendí que el gritarles los lastimaba mucho, pero seguía sin entender que el que alguien me hiciera esto a mí me lastimaba mucho.

Me tomó muchos años abrirme al profundo dolor y desgarro del comportamiento no amoroso de alguien hacia mí.

Ahora ya sé.

Y ahora yo sé que existen dos tipos de heridas – una que causo yo y otra que es causada por los demás.

Herida causada por los demás
Cuando alguien, especialmente alguien importante para ti, está enojado y gritándote, culpándote, amenazándote, juzgándote, o atacándote de alguna forma, callándote, retrayéndose, cerrando su corazón para ti – y tú estás abierto a tus sentimientos- vas a sentir algo de desgarro, soledad, y/o tristeza. Estos son los sentimientos naturales – los sentimientos que mi pequeño hijo estaba sintiendo – cuando alguien no está siendo amoroso contigo y se desconecta de ti.
Lo que causa la herida más profunda puede ser que ni siquiera sea lo que están diciendo o haciendo, sino el hecho de que están siendo desconsiderados contigo. Es muy importante que aprendas a distinguir entre alguien que está siendo deliberadamente hiriente, y alguien que está siendo hiriente sin saberlo. Yo no sabía que estaba hiriendo a mi hijo hasta que él me lo dijo. Mucha gente ha sido muy desconsiderada e hiriente conmigo pero no lo supieron porque yo no se los dije – porque yo no lo sabía. La mayoría de las veces, las personas no están deliberadamente tratando de herirte, y si supieran que te estaban hiriendo se sentirían muy mal. Sin embargo, existen situaciones en que las personas son deliberadamente hirientes, y es de suma importancia en términos de cuidar de tu niño interior no estar alrededor de personas que te QUIEREN herir.

Herida causada por lo que tú te dices acerca de los demás
Jenni me llamó porque se estaba sintiendo muy herida por el hecho de que su esposo quería irse en un fin de semana largo a un viaje de pesca con un grupo de amigos.
“¿Qué es lo que te está lastimando acerca de esto?”  Le pregunté.
“¿Por qué quiere pasar todo el tiempo con ellos en lugar de conmigo?”
Este es el tipo de herida que es causada por algo que Jenni se está diciendo a sí misma. Su esposo está haciendo lo que quiere sin ningún deseo de herirla. Esta es la herida del yo herido que viene de la falsa creencia del yo herido – las mentiras que todos nos decimos a nosotros mismos.
Las mentiras que Jenni se estaba diciendo a ella misma eran:
·       Si él realmente me amara, no querría estar lejos de mí por tanto tiempo.
·       Para que él quiera pasar tanto tiempo con sus amigos en lugar de conmigo debo de ser aburrida para él.
·       Ya no está enamorado de mí.
·       Probablemente ni siquiera va ir a pescar. Eso es lo que me dice, pero la verdad es que está teniendo un romance.

El yo herido de Jenni inventó todo esto, pero ella está actuando como si fuera verdad. La verdad es, como supe después por su esposo, que él no pasa mucho tiempo con sus amigos y que le encanta pescar. A él le da mucha tristeza que Jenni se sienta herida por lo que él quiere hacer, en lugar de apoyarlo.
Ya sea que estés lidiando con heridas falsas o con heridas naturales, es tú responsabilidad estar ahí para ti mismo con bondad y compasión y con la intención de aprender acerca de lo que tus sentimientos te están diciendo.